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Aprendizaje y crecimiento y en nuestra reflexión personal los momentos difíciles de la pandemia también pasarán

Mi reflexión personal de esta semana, los momentos difíciles también pasarán, todo lo que pasa o nos llega es para nuestro crecimiento y propio bienestar. Un buen empleo o una posición laboral generalmente se logran empezando de cero en una empresa y se va escalando, una familia se logra disfrutando de lo bello de cada ser humano, pero aceptando que cada parte bella va también acompañada de una parte no tan agradable. Nunca estaremos totalmente preparados y nunca existirá un momento adecuado, a veces lo único que necesitamos para alcanzar nuestra felicidad es confiar en Dios, respirar y decidirnos a ser felices con lo que tenemos, pues si no fuera así no existiría en el diccionario la palabra héroes, heroínas y valientes. Y hoy les pregunto que esperamos para ser felices, sentirnos felices por el simple hecho de estar vivos y con salud en este tiempo de pandemia.

Revisión de metas y las disciplinas que hay que potenciar y en la reflexión no hay nada oculto todo sale siempre a la luz

Mi reflexión personal de esta semana, no hay nada oculto bajo el sol, leyendo esta semana un hermoso libro que me regalaron a principios de año y que has sido de gran utilidad para meditar en este tiempo de largo confinamiento con el título Alimento para el Alma, un libro de lecturas bíblicas y meditaciones para cada día, una lectura esta semana me dejaba una gran reflexión porque como indica este libro el que camina con integridad anda confiado.

Tarde o temprano todas las cosas salen a la vista por lo tanto aquí radica la importancia de caminar con integridad, lo cual solo podemos lograr cuando permitimos que Dios guíe nuestros pasos y caminemos de este modo con seguridad, con rectitud y con integridad, le exhorto a revisar sus acciones y comportamiento de cada día.

Revisando nuestras metas 2020

Mi reflexión personal de esta semana, tiene que ver con la esperanza, muchas veces en nuestras vidas algunos sucesos que no podemos controlar nos turban, provocando en nosotros el desánimo y el miedo, y nos olvidamos que Dios es el capitán que dirige el timón de nuestras vidas y tiene todo bajo su control, le exhorto a que no desesperemos, ni permitamos que la melancolía, la derrota, la tristeza, marchiten nuestro corazón, porque si nuestro corazón se debilita, no podremos recibir todas las bendiciones que vienen envueltas en cada una de nuestras situaciones, hoy les animo a que confíen en Dios y que todos los métodos que utiliza con nosotros son infinitamente sabios y al final todo obra para bien.